Que hasta el conocimiento generado en las Jornadas de los OSCEdays sobre la Economía circular en código abierto sea circular, o que las jornadas sean circulares en sí mismas, parece ser el objetivo que se han marcado para el futuro los participantes de la edición OSCEdays Barcelona 2016. Estas jornadas se celebraron simultáneamente en varios lugares del mundo del 9 al 13 de junio. En Barcelona reunieron a personas y colectivos afines para reflexionar, trabajar y difundir los conceptos de Economía circular en Código abierto, desde una perspectiva social y de interés común.
El sábado 11 de junio en la Fábrica de Creación de Fabra i Coats, se hizo una jornada de mañana y tarde con diferentes sesiones de “concentración” para compartir ideas y soluciones, prototipos, sistemas, productos y diseños, en un formato “barcamp” abierto y un calendario flexible, que iba siendo co-diseñado por los participantes a medida que se sucedían las sesiones. La “economía colaborativa puede involucrar a muchos agentes”, indicó Mayo Fuster, del grupo de investigación Dimmons del IN3 de la UOC, al hablar sobre políticas públicas para la economía circular procomún y señaló que cómo coordinarlos entre ellos es un primer reto, para ello se quiere aplicar metodologías ágiles y definir las líneas de trabajo más adecuadas.
Otra de las sesiones iniciales consistió en una entrevista colectiva a Trebor Scholz, autor del libro Cooperativismo de Plataforma, facilitada por Enric Senabre, también del grupo de investigación Dimmons del IN3, en que diferentes colectivos y proyectos plantearon retos como la digitalización de cooperativas de viviendas, el rol de los ciudadanos "prosumidores" o el papel aún no visible en la economía colaborativa de la reutilización y el reciclaje. Y en este sentido, Wouter Tebbens de Free Knowledge Institute, quiso iIustrar la viabilidad del modelo OSCE, la posibilidad de generación de ingresos, gestión colectiva de valor compartido y modelos innovadores de sostenibilidad. Esto dio pie a un debate sobre cómo generar confianza, hacer balance social y evaluar y validar las aportaciones a esa economía. Para ilustrar estos temas mencionó ejemplos como Reutilitza, Andròmines, gufi.net,... y ¡nuestra plataforma Goteo!
Goteo fue mencionada en diversas ocasiones durante la jornada como la mejor herramienta de cofinanciación para proyectos Open Source, por ser de código libre y promover el conocimiento abierto. Mercè Moreno, desde Goteo, hizo hincapié en el valor de los retornos colectivos (conocimiento digitalizado bajo licencias libres/abiertas) como garantes del retorno social y circularidad de las campañas cofinanciadas, así como en el modelo híbrido de sostenibilidad económica de la plataforma.
Una propuesta vino de XCTIT, la red de ciencia, técnica y tecnología, creada “para unir áreas que los mercados han separado”, explicó Elle Flane, y así facilitar los procesos de creación (con distribuidores de materias primas, productores, manufacturadores, instaladores, ingenieros, diseñadores, inventores), co-creando herramientas de financiación, jurídicas y comunicativas. XCTIT ha diseñado un formulario de autoregistro y autoevaluación, para que el creador (de objetos físicos, productos o prototipos, o procesos de fabricación) pueda auto-otorgarse una clasificación de sostenibilidad y control de versiones en los dispositivos para las posibles mejoras de los procesos y productos licenciados con la Licencia XCTIT-GPL. En el debate sobre XCTIT se llegó a la conclusión que ésta sería una mezcla entre una licencia con la que quien lo hace tiene que citar al creador y publicar los cambios y/o mejoras, y un sello que garantiza las condiciones al comprador. Se debatió sobre los posibles medios de garantizar el cumplimiento de las condiciones y sobre la escalabilidad y posibilidad de descentralización del modelo actual en fase piloto.
El colectivo Makea Tu Vida presentó la plataforma El Recetario.net (también cofinanciada en Goteo), inicialmente una manera de documentar lo que hacían y que se abrió a lo colectivo para que la gente pudiera editar y aportar información y reutilzarla. Ahora recoge 454 recetas y tiene 677 usuarios, y se licencian los vídeos, fotos, planos, planimetrías, etc, lo interesante es ver el impacto de estas aportaciones a la economía distributiva que se encuentra detrás de ellas. La nueva versión 4.0 de la plataforma va a intentar acometer nuevos retos, como facilitar más la interacción entre participantes. Una vía complementaria para la conexión entre ofertas y demandas de materiales entre iniciativas sociales, administraciones públicas y entidades privadas es la plataforma GRRR (Gestión para la Reutilización y Redistribución de Recursos), del Grupo GRRR Arquitecturas Colectivas, del cual Makea Tu Vida forma parte.
Se habló además de diseño resiliente, licencias procomunes, talleres comunales, diseño de apps en código abierto, y las propuestas fueron muchas y muy diversas: los talleres participativos Trash Pop-Up de Transfodesign, la Fundación Feniss de energía e innovación sostenible, el prototipo de Rizoma con Freedom Coop, la red de Ateneos de Fabricación de l’Ajuntament de Barcelona, y del proyecto Teixidora.net de SeguimFils para la toma de apuntes colaborativos, su reapropiación y reelaboración (un proceso seguido para la elaboración de este mismo artículo). En una de las últimas sesiones sobre modelos de negocio y sostenibilidad Wouter Tebbens llamó la atención sobre la complementariedad de muchos de estos proyectos como parte de un ecosistema y la necesidad de colaborar, algo que estaba ya en boca de todos durante la jornada.
La idea es no empezar de cero cada año, por eso se ha recogido aquí parte de la información generada durante las jornadas del año pasado, en 2015. Un resumen y las diapositivas de las presentaciones de la edición de este 2016 quedarán recogidas en la página web del evento, para poder sacar concusiones, dar continuidad a las conversaciones iniciadas estos días y tomarlas como punto de partida en próximos encuentros y eventos del grupo motor de las jornadas en Barcelona. Un objetivo adicional será lograr más feedback y colaboración con las jornadas que se hacen en el resto del mundo.